Ha pasado algo muy gordo que el ayuntamiento de Las Torres de Cotillas debería haber comunicado a los vecinos pero no lo ha hecho. Por irresponsabilidad e insensibilidad hacia los torreños una vez más.
En los 2 recibos rectificativos trimestrales que, correspondientes al consumo de agua del año pasado, han llegado por correo a los vecinos aparece en su parte de abajo como fecha límite de pago de ambas facturas la del 22 de este mes para quienes no lo tienen domiciliado por el banco. Y a los que los tienen también les avisan de que cargarán el cobro a su cuenta.
Y he aquí el gran error: esos 2 recibos ya se facturaron y se pusieron al cobro por Hidrogea en mayo y septiembre de 2020.
Así que no toca pagar de nuevo estas 2 facturas del agua si ya se cobraron el año pasado.
Desde el PP de Las Torres de Cotillas informamos a los vecinos que ya no tienen que pagar nada. Y aquellos torreños que pagaron el año pasado los 2 recibos en cuestión de 2020 y ahora hayan vuelto a hacerlo, confundidos por esa fecha límite errónea del 22 de febrero, deben recuperar ese dinero cobrado de forma indebida. Tienen derecho a que se les reintegre urgentemente ese importe.
¿En qué cabeza cabe mandar cartas a los vecinos reconociendo por un lado que han pagado agua de más en el 2020 y por otro poniéndoles como fecha tope de cobro el próximo 22 de febrero?
Lo único que hay que hacer es devolverles a los torreños el dinero cobrado de más en 2020 por las lecturas estimadas y no reales por suministro de agua durante el confinamiento y estado de alarma. Sólo eso y no asustar ni marear más.
¿Cómo da lugar el ayuntamiento del PSOE y Ciudadanos a que pasen estas cosas? Un fallo tras otro.
El Equipo de Des-gobierno no está encima de la gestión correcta de un servicio tan importante como el suministro de agua potable a los vecinos. No controla las tarifas, permite que haya fallos en el cobro de los recibos y alarma así a los torreños.
Una incompetencia que de nuevo afecta a los bolsillos de los vecinos.
PSOE y Ciudadanos fallan más que una escopeta de feria.
!Qué manera más chapucera de gobernar un pueblo!