El PP de Las Torres de Cotillas pedirá mañana en Pleno al Gobierno de Pedro Sánchez un plan urgente de ayudas a los ganaderos que frene las pérdidas provocadas por la huelga de transportistas y la guerra de Ucrania
Los populares locales exigirán para ello en una moción la bajada de los impuestos de los carburantes, del gas y de las materias primas
El compromiso del PP de Las Torres de Cotillas con los ganaderos se materializará mañana lunes con una moción que los populares de la localidad llevarán a Pleno para exigir al Ejecutivo de Pedro Sánchez un plan de medidas inmediatas y contundentes para hacer frente a las pérdidas provocadas por la huelga de transportistas y el encarecimiento de los piensos y combustibles y por la guerra en Ucrania.
Para atajar el impacto de esta crisis que aboca a los ganaderos a una situación dramática e insostenible, el PP torreño exigirá con su propuesta plenaria al Gobierno de Pedro Sánchez un plan de choque, que debe llevar bajadas de los impuestos y aplicación de medidas fiscales ya, sobre todo el de los combustibles e hidrocarburos; de la luz y del gas al 4%; al igual que el de las materias primas, como los piensos y de otros productos necesarios para mantener el sistema productivo.
De este modo, los populares torreños piden la eliminación o, ante su imposibilidad, reducción del tipo de IVA hasta el tipo súper reducido (4%) a aplicar en las diferentes materias primas, el incremento del tipo de bonificación del impuesto de hidrocarburos para el gasóleo profesional o, una flexibilización máxima arancelaria, de forma temporal, para agilizar el abastecimiento de los cereales y resto de materias primas que pudieran poner en riesgo la estabilidad del sector así como la adopción de normativas que garanticen el incremento de productividad de los terrenos de nuestra Región, entre otras, permitiendo que las zonas de barbecho puedan ser cultivadas.
Unido a todo esto se hace urgente, expresa la moción del PP de Las Torres de Cotillas, que el gobierno de la Nación se ponga también a trabajar en una política de agua seria y solvente con acciones integradoras, consensuadas y solidarias basadas en criterios técnicos y científicos, dejando a un lado los intereses políticos e ideológicos y el sectarismo reinante hasta ahora en las políticas de agua del Ejecutivo de Pedro Sánchez, pues lo contrario pone en serio peligro la subsistencia de la economía del sureste de España y los empleos de miles de familias.